Flan de queso philadelphia sin horno

Receta ↓ Ángela Solar

Imagina poder disfrutar de un cremoso flan de queso philadelphia sin siquiera prender el horno. Esta receta es un verdadero tesoro para aquellos que buscan impresionar a sus comensales con un postre sublime y sin esfuerzo. ¿Te imaginas la cara de tus invitados al probarlo?

Desde que descubrí esta maravilla, se ha convertido en el broche de oro de mis cenas. Y lo mejor de todo, es que está listo en un abrir y cerrar de ojos.

Y si lo que deseas es seguir explorando sabores únicos, te invito a probar la [tortilla de alcachofas](https://recetasalcachofas.es/tortilla-de-alcachofas/), un plato que siempre me transporta a los campos de mi abuela. O quizás prefieras sumergirte en la tradición con el [caldo gallego de la abuela](https://caldogallego.net/caldo-gallego-receta-de-la-abuela/), una receta que calienta el alma. Y para los amantes de la tecnología culinaria, ¿qué tal un [ajoblanco perfecto con Thermomix](https://ajoblanco.com.es/ajoblanco-thermomix/)?

Este flan de queso sin horno no es solo un postre, es una experiencia que te invito a descubrir. ¿Te animas a darle sabor a tu vida con estas recetas?

¡Los imprescindibles para tu flan!

¡Manos a la obra! Para conquistar los corazones de tus invitados con este flan de queso Philadelphia sin horno, necesitas unos pocos ingredientes que son puro oro.

• Queso Philadelphia – La joya de la corona, déjalo fuera de la nevera un ratito para que se convierta en pura seda al combinarlo.
• Leche condensada – El toque dulce que enamora, es la pareja ideal y le da esa textura que hace que cada bocado sea un sueño.
• Nata para montar – ¿Buscas esa cremosidad que te hace cerrar los ojos y suspirar? Aquí la tienes, es el abrazo que le faltaba a tu postre.
• Gelatina sin sabor – El as bajo la manga que nos permite obtener un postre que se sostiene como un campeón.

Preparación de la gelatina: el secreto para un flan de queso perfecto

¡Hola, cocineros! Preparar gelatina sin sabor es clave para lograr un flan de Philadelphia sin horno que se sostenga como campeón. Pero no te preocupes, es mucho más fácil de lo que parece.

Lo primero que debes hacer es disolver la gelatina en agua fría. Sí, has leído bien, ¡en agua fría! Esto ayudará a que la gelatina se hidrate correctamente y se disuelva más fácilmente en el siguiente paso.

Una vez hidratada, calienta a fuego medio hasta que se disuelva por completo. Recuerda, no necesitas hervirla, solo calentarla lo suficiente para que se disuelva. Puedes decir que está lista cuando no veas grumos.

Siempre me ha encantado prepararla para este flan. Me recuerda a cuando era pequeña y mi abuela me enseñaba a hacer postres caseros. Es una sensación muy reconfortante.

¡Manos en la masa!

Ha llegado la hora de que te conviertas en el alquimista de sabores que dará vida a este flan de Philadelphia sin horno. Coge esa batidora y mima el Philadelphia hasta que se transforme en una crema suave que acaricie tus sentidos. Ahora, con el mismo cariño, ve añadiendo la leche condensada y la nata para montar, y mezcla con pasión hasta que la textura te haga cerrar los ojos y sonreír. Y para el gran final, la gelatina sin sabor ya lista entra en escena, mézclala con delicadeza hasta que se funda en un abrazo con el resto de los ingredientes. Esta es la magia que hará que tu postre sea el protagonista de la fiesta.

1. Remueve el Philadelphia hasta lograr una textura envidiable.
2. Añade poco a poco la leche condensada y la nata para montar, y bátelas con entusiasmo.
3. Incorpora la gelatina sin sabor disuelta y da el toque final a la mezcla. Incorpora la disolución de gelatina sin sabor y da el toque final a la mezcla.

¡Ya estás muy cerca de disfrutar de tu delicioso queso Philadelphia sin horno! Una vez que hayas preparado la mezcla, es hora de pasar al siguiente paso: vertirla en un molde desmontable.

Asegúrate de que el molde esté limpio y seco antes de usar. Personalmente, me gusta engrasarlo ligeramente con un poco de aceite de oliva o mantequilla para facilitar el desmoldado más tarde. También puedes usar spray antiadherente si lo prefieres.

Después de verterla en el molde, colócalo en la nevera y deja que se enfríe durante un mínimo de 4 horas. Si tienes paciencia, te recomiendo dejarlo toda la noche para obtener una textura más firme y cremosa.

• Asegúrate de que el molde esté limpio y seco antes de usar.
• Engrasa ligeramente el molde para facilitar el desmoldado.
• Deja que la mezcla se enfríe en la nevera durante al menos 4 horas o toda la noche.